Según el Dane, de 11,4 millones de hogares urbanos que hay en el país, 4,9 millones (44 por ciento) viven en arriendo. Esta cifra hace que suene bien la idea de tener propiedades habitacionales para arrendar, pero la realidad es que muchos de los inquilinos no son tan responsables con los pagos. Por esta razón, es importante que tome las medidas necesarias para evitarse el problema de los arrendatarios morosos.
Central de Arrendamientos
Conoce la reglamentación
Te invitamos a consultar los pormenores de la Ley 820 del 2003, la cual contempla todas las causales de incumplimiento, tanto de los arrendatarios como de los arrendadores para los contratos destinados a vivienda urbana y los artículos 518 a 524 del Código de Comercio, que contemplan algunos parámetros de un contrato de arrendamiento como elemento de un establecimiento de comercio.
No esta de menos revisar algunos parámetros del Código Civil, que regula lo que no esté previsto por las normas anteriormente relacionadas.
Solo realiza contratos por escrito
Sin importar la cercanía que tengas con tu futuro inquilino, realiza un contrato por escrito y deja de lado los acuerdos verbales. “Las palabras se las lleva el viento”. Recuerda que si te incumplen el contrato y lo celebraste por escrito podrás de una manera más rápida hacer exigible tus derechos.
Verifica la capacidad de pago
No dejes tus propiedades en manos de cualquier persona, siempre debes verificar que tus próximos inquilinos tengan capacidad de pago para responder con los convenios acordados en el contrato. No lo veas como un obstáculo, para esto te recomendamos acudir a las aseguradoras, quienes son expertos en identificar la real situación económica de los interesados en tomar en arriendo tu propiedad.
Autentica el contrato en una notaría
No es una obligación pero es lo más aconsejable. Es una cita que deben cumplir: el arrendatario, el codeudor y tú como arrendador. Antes de firmar cualquier documento podrías asesorarte de un abogado experto. Las aseguradoras también cuentan con este tipo de profesionales, los cuales te garantizarán que no hayan vacíos en los contratos que te podrían generar problemas a futuro.